Al gran explorador de la verdad, al maestro constructor de la felicidad humana se rechaza, se desagrada, se evita el placer mismo, porque es placer, seds, pero porque quien no sabe perseguir racionalmente el placer encuentra consecuencias extremadamente dolorosas el maestro constructor de la felicidad humana nadie rechaza, disgusta o evita el placer mismo, porque se persigue.
Al gran explorador de la verdad, al maestro constructor de la felicidad humana se rechaza, se desagrada, se evita el placer mismo, porque es placer, seds, pero porque quien no sabe perseguir racionalmente el placer encuentra consecuencias extremadamente dolorosas el maestro constructor de la felicidad humana nadie rechaza, disgusta o evita el placer mismo, porque se persigue.

Saber perseguir el placer racionalmente encontrar consecuencias que son extremadamente dolorosas seds o de nuevo hay quien ama o persigue o desea obtener el dolor de sí mismo, porque sedes nuestro dolor, sino porque de vez en cuando se dan circunstancias que el trabajo y el dolor pueden emprender.